Entre la coloración, el secador o simplemente la cal del agua y el cloro de las piscinas, el cabello sometido a las situaciones cotidianas (y a nuestros deseos capilares) necesita un poco de atención si queremos mantenerlo sano. La fibra capilar es a la vez fuerte y frágil: veamos qué ofrece la naturaleza para mejorarla.
El crecimiento del cabello es un proceso largo y laborioso llamado ciclo capilar. Durante este ciclo, el cabello pasa por tres fases principales: crece, involuciona (lo contrario de evolucionar) y se cae. Estos ciclos se repiten indefinidamente a lo largo de la vida, y cada folículo piloso puede producir unos 25 pelos. La fase de crecimiento del cabello dura una media de tres años, y está sujeta a variaciones hormonales (por eso es más larga en las mujeres). La naturaleza hace bien su trabajo: cada folículo evoluciona individualmente, para que no perdamos todo el pelo al mismo tiempo. Así, a lo largo del ciclo capilar, el cabello no deja de renovarse y trabajar sin que nos demos cuenta.
Los largos son el otro nombre que recibe el tallo piloso, que es el pelo en sí. Implantado de forma oblicua en la piel a través del folículo sebáceo, el tallo piloso es la parte libre y visible del cabello y está formado por queratina. Su diámetro varía entre 70 y 100 micras.
El tallo piloso está formado por 3 capas de células concéntricas:
La médula, que se encuentra en el centro, son células redondeadas no pigmentadas, sin capacidades ni propiedades específicas.
El córtex, o corteza, que representa el 90 % del peso total del pelo, es decir, su parte más gruesa. Aunque desempeña un papel importante en la resistencia del cabello, puede ser muy sensible a diversas agresiones (viento, frío, sol, calor, etc.).
La cutícula: formada por escamas, protege la corteza de las agresiones externas. Aporta al cabello su aspecto brillante.
Ayuda, tengo las puntas secas y los largos dañados. ¿Cómo ha ocurrido?
Usar demasiado calor en el cabello, tintes agresivos, alisarlo con demasiada frecuencia, rayos UV, viento, falta de tratamientos adecuados...
1. La película hidrolipídica, la barrera protectora del cabello, se ve afectada: atacada por diversas agresiones, este escudo protector superficial ya no desempeña plenamente su función de barrera. El cabello, ya debilitado, está expuesto a las agresiones externas.
2. La cutícula se levanta: cuando las escamas que forman la cutícula se dañan y se desprenden, el interior del cabello queda al descubierto, el agua presente de forma natural se evapora en exceso y el cabello se seca.
3. La queratina sufre daños en el núcleo del cabello: Dañadas por estos microtraumas, las cadenas de queratina que componen el cabello se rompen. Cuando esto falta, el cabello se vuelve poroso, quebradizo, seco y menos bello.
El crecimiento del cabello de cerca...
Para crecer, el cabello cuenta con la aportación de numerosos activos:
- Aminoácidos de azufre, metionina, cisteína y cistina, necesarios para la síntesis de la queratina
- Ácidos grasos (ácido linoleico, ácido linolénico, ácido araquidónico), que son necesarios para el cemento intercelular que mantiene unidas las células
- Metales y vitaminas (zinc, cobre, vitaminas A, C, B5, B6, B8) que son necesarios para diversas reacciones del organismo y, en particular, para la síntesis de los componentes del cabello.
Todos estos elementos se trasladan hasta el folículo por la red vascular (vasos sanguíneos). Por tanto, la vascularización de la papila folicular desempeña un papel fundamental en el suministro de nutrientes a las células del bulbo piloso. Las hormonas también desempeñan un papel importante en la secreción de sebo.
Las puntas están secas y carecen de suavidad y flexibilidad al tacto.
Un cabello pajizo, apagado o sin brillo es señal de un cabello dañado y deshidratado que necesita urgentemente una dosis de nutrición y reparación profundas. Afortunadamente, nuestros productos para el cuidado del cabello con ingredientes naturales te ayudarán.
Me seco y/o aliso el pelo cada semana, tengo problemas para manejar mis rizos o mi pelo se enreda fácilmente.
Alisar, desenredar... Lo has intentado todo, pero tu cabello no se comporta. Tanto si tu cabello es rebelde por naturaleza (rizado, encrespado o muy rizado), como si se ha transformado con el paso del tiempo debido a repetidas agresiones, es mejor curar que dañar.
Nutro mi cabello en profundidad y elijo los cuidados adecuados para mi color natural.
Tanto si está teñido como si no, el color es un factor importante en la belleza del cabello. Cuanto más sano y nutrido esté tu cabello, más podrá reflejar la luz y estar radiante. Por lo tanto, una rutina de cuidado del cabello adaptada a cada tono y necesidades es esencial para reavivar el color.
Bueno, esto no es del todo cierto, ya que el cabello crece desde la raíz. Pero las puntas secas y abiertas son un cabello casi irreparable. Y para evitar que el cabello se dañe más arriba, es mejor cortar las puntas abiertas. El cabello volverá a crecer más sano, más fácil de desenredar y con una forma más bonita.
En realidad no, ya que el pelo está muerto. Pero, ¿qué pasa cuando tengo nudos dolorosos, o después de llevar el pelo recogido? Se trata de un dolor en la raíz del cabello debido a la tensión. Para aliviar el dolor, puedes darte un masaje en el cuero cabelludo en la ducha para aliviar la tensión y activar la microcirculación.
Sí, nuestro cabello no tiene el mismo aspecto cuando tenemos 5, 15 o 50 años. El ciclo del cabello está directamente influenciado por nuestras hormonas, por lo que no es igual para hombres y mujeres, y es diferente para las mujeres embarazadas. Con la edad y los cambios hormonales, el cabello produce cada vez menos queratina y sebo, y pierde densidad: este envejecimiento del cabello y del cuero cabelludo debe ir acompañado de los productos adecuados.
Depende del tipo de cabello, pero en general, una o dos veces por semana, no más. Dependiendo de las necesidades específicas, también se puede aplicar un acondicionador o un producto hidratante para desenredar y nutrir el cabello. En cualquier caso, no se recomienda lavarse el pelo a diario: se corre el riesgo de eliminar el sebo natural del cabello, que es lo que aporta brillo y salud. El champú seco es una gran alternativa a los lavados diarios.